Muéstrate en tus presentaciones on line
Muéstrate en tus presentaciones on line, permitir que los otros nos vean es de gran importancia.
El ser humano trabaja mejor tanto en recuerdo como en adaptación de las ideas y también en la toma de decisiones positivas, cuando existe empatía con el interlocutor. En muchos análisis de Neuromarketing gracias a la neurociencia, se detectan claramente estos aspectos.
Cuando estamos realizando una presentación, nuestro interlocutor estará subconscientemente intentando analizar la empatía en base a diferentes aspectos. El tono de voz, como vamos vestidos, la imagen detrás del presentador son aspectos que se están evaluando. Pero de todos ellos, el tono de voz y la imagen que se ve de la persona que está presentando son las más relevantes.
La atracción del rostro humano
Richard Fantz analizó, en un estudio, el atractivo que para el ser humano tiene la cara de los demás. Y observó que ya desde la más tierna infancia existe una importante atracción por los rostros. Es decir que existe atracción hacia el rostro de la persona que está realizando una presentación y por tanto su empatía y su percepción de ser agradable aumentará de manera notoria al mostrarse. Ocultarse detrás de una imagen fija, solo puede hacer menos efectiva su presentación.
Incluso cuando esté compartiendo su pantalla, permita que los demás le vean, no cerrando la cámara. Las personas miran la cara de quien les habla para intentar captar sus intenciones, emociones, estado de ánimo, etc. Y si no lo ven, reaccionarán sub-coscientemente con sospecha, desinterés falta de atención y mayor tendencia a la no aceptación del mensaje.
La distancia a la cámara
La mejor distancia para aparecer en la pantalla es una distancia media. Demasiado cerca apareceremos deformados y algo agresivos, además de que se nos verán mucho los defectos. Por el contrario, en una distancia media podrán vernos parte del cuerpo en la que verán o detectarán nuestra actitud, y sobre todo podrán vernos las manos.
El poder de las manos.
El lenguaje corporal es de un gran poder de comunicación, porque el cerebro de la mayoría de las personas es visual. Y con las manos podemos comunicar muchas cosas. Desde aceptación, tranquilidad, determinación, comprensión a integración de la audiencia o coordinación y acuerdo.
Por esto, el ordenador ha de estar suficientemente alejado para no deformar nuestro rostro y para que se nos vean las manos y la parte superior del cuerpo cuando estamos presentando.
Y por supuesto, gesticulemos. Nuestra audiencia lo agradecerá y la presentación mejorará perceptiblemente.
La mirada
Generalmente la cámara de los ordenadores suele estar por encima de la pantalla, lo que implica que cuando estamos presentando estaremos siendo vistos con la mirada hacia abajo. En las presentaciones hay que hacer como los presentadores de la televisión, es decir mirar a la cámara. Generalmente los ordenadores tienen una pequeña luz para indicarnos que la cámara está funcionando. Bueno, pues hay que mirar ahí a menudo. Y especialmente cuando utilicemos frases que intentan convencer de algo.
Un truco para no mirar muy abajo en la pantalla es poner las caras de los demás cerca de la pantalla. Es decir, levantar la pantalla de la aplicación de comunicación que estemos utilizando lo más cerca posible de la cámara. Esto mejorará también en cuanto pongamos algo de distancia con la pantalla del ordenador.
Conclusión.
En las presentaciones, no es conveniente apagar la cámara. Cuidemos lo que va a aparecer detrás de ella, y mostrémonos.
Siguiente: cerrar una presentación online